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MEDICINA FÍSICA Y REHABILITACIÓN

La figura del médico rehabilitador está enfocada al diagnóstico, prevención y tratamiento de la discapacidad, de manera que su objetivo siempre será dotar del mayor grado de capacidad funcional al paciente.

La rehabilitación es una especialidad médica que como su propio nombre indica busca que la persona recupere el nivel de independencia que previamente había perdido debido a alguna lesión o proceso patológico y que le produjo por lo tanto una incapacidad para llevar a cabo alguna tarea determinada de su vida cotidiana. El médico rehabilitador está especialmente formado para el tratamiento de las incapacidades provocadas por patologías de diversas etiologías, ya sean de tipo neurológico, traumatológico, cardio-vasculares o respiratorias.

En ACD REHABILITACIÓN contamos con un médico rehabilitador, el cual se encarga de llevar a cabo una valoración inicial del paciente con un exhaustivo análisis de sus destrezas y limitaciones, para posteriormente pautar al resto de profesionales las necesidades terapéuticas del paciente y tras mantener una reunión con el equipo, decidir que perfiles profesionales se adaptan mas a las necesidades del paciente y en que medida deberá incidir cada uno, logrando así crear un modelo de rehabilitación totalmente individualizado y adaptado a cada paciente, siempre bajo la supervisión de esta figura profesional.

Una vez iniciado el proceso rehabilitador, la figura del médico rehabilitador sigue presente en el mismo, llevando a cabo un detallado seguimiento de cada caso mediante la comunicación directa con los profesionales que llevan a cabo la intervención, y mediante reevaluaciones periódicas para determinar la evolución del paciente, de manera que, en cualquier momento del proceso rehabilitador puede decidir realizar cambios en el mismo si considera que estos pueden ayudar a que la persone experimente una mayor mejoría.

Será también esta figura profesional la encargada de llevar a cabo el informe de alta, cuando tras realizar una última evaluación del paciente, de por concluido el proceso rehabilitador. En este momento el médico además de realizar el informe de alta, puede mantener una entrevista con el paciente y sus familiares con el objetivo de asesorarles acerca de los cuidados que deben de tener una vez en el domicilio, así como dándoles unas pautas de tratamiento al alta, con ejercicios y actividades que deberán llevar a cabo en su entorno, si el propio médico lo considerara necesario.

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